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EL GOBIERNO ANDALUZ PRETENDE PROLONGAR LA ACTIVIDAD DE LOS VERTEDEROS DE RESIDUOS PELIGROSOS DE NERVA (HUELVA) Y BOLAÑOS (JEREZ) EN PLENA ALARMA SANITARIA

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En plena situación de confinamiento por la alarma sanitaria y con el Real Decreto de desregulación de la actividad económica, la Junta de Andalucía somete a información pública dos proyectos para prolongar la actividad de los dos vertederos de residuos peligrosos y no peligrosos más importantes que tiene nuestra comunidad, el de Nerva (Huelva), gestionado por Ditecsa, y el de Bolaños (Jerez), propiedad de Verinsur.

En ambos casos se trata de dos vertederos de más de 20 años de actividad, necesitados de un procedimiento de clausura y sellado por no cumplir los criterios de la Unión Europea en su programa de Economía Circular, que plantea una  reducción progresiva de los residuos que se llevan a la mal llamada “eliminación”, es decir a un vertedero, para implantar el nuevo paradigma de la minimización de los residuos y de ecodiseño industrial que posibilite la reintroducción de los residuos para que el sistema económico los valorice como recursos. Los cálculos de la Fundación MacArthur señalan que la industria manufacturera europea podría ahorrase unos 650.000 millones de € hasta 2025 si se rediseñan los sistemas productivos de acuerdo con estos principios.

Los dos proyectos a consulta van en sentido contrario, contradiciendo incluso los objetivos del futuro PIRec andaluz, Plan Integral de Residuos economía circular:

  • Reforzar y acelerar la transición de Andalucía hacia una economía circular, impulsar la competitividad, crear empleo y generar crecimiento sostenible.
  • Actualizar los objetivos de prevención, reciclado, valorización y eliminación a las nuevas directrices europeas procedentes del paquete de medidas de estímulo de la economía circular, con nuevos objetivos reciclado y reducción de residuos para el horizonte 2030.
  • Que el valor de los productos y materiales se mantenga durante el mayor tiempo posible, así como a un aumento de la reutilización, la reciclabilidad y la valorización material que implique una reducción de la eliminación.

Los vertederos de Bolaños en Jerez tienen una capacidad de más de 50 mil m3 el de residuos peligrosos y 6 millones y medio de m3 el de no peligrosos, y están cercanos a la saturación. En el caso de Nerva, la capacidad autorizada de la planta es de 7 millones y medio de m3, de las que 5 millones están ya ocupadas.

Ditecsa es una de las empresas que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), sancionó en 2018 por prácticas restrictivas de la competencia. Befesa, la anterior gestora del vertedero de Nerva, fue objeto también de numerosos expedientes sancionadores por parte de la Consejería de Medio Ambiente por los reiterados incendios ocurridos en sus instalaciones y los vertidos no autorizados. La existencia de un vertedero de residuos peligrosos en las inmediaciones de la población de Nerva es un atentado a la salud y a la seguridad de esta población, en la que ha generado un contundente rechazo social.

Estos vertederos, a los que el Real Decreto va a facilitar toda la tramitación, son auténticos reactores químicos que generan emisiones y vertidos tóxicos, que se prolongarán durante décadas tras su clausura. Por ello, nada justifica su continuidad. Y menos con la indefensión legal a que nos somete el Real Decreto, amparándose en una supuesta flexibilización de trámites, que en realidad es un trágala insostenible.

La Fiscalía de Medio Ambiente de España identificó 118 vertederos con riesgo alto de incendio, 44 de ellos en Andalucía. La emergencia climática exigiría poner fin también a estas instalaciones por la elevada emisión de gases de efecto invernadero que suponen, sobre todo de metano. Es incompatible un Plan Andaluz de Acción por el Clima con la persistencia de estos gigantescos vertederos en nuestra comunidad.

La Ley 8/2018 de medidas frente al cambio climático y para la transición hacia un nuevo modelo energético en Andalucía, y el recién formulado Plan Andaluz de Acción por el Clima, se dirigen a poner en práctica una “revolución verde” (Moreno Bonilla dixit), que inicie un movimiento para alcanzar una sociedad y una estructura productiva descarbonizada y renovable: justamente lo antagónico al vertido continuado de residuos peligrosos y no peligrosos que representan estas instalaciones a las que se pretende dar viabilidad.

En el caso de Nerva, además se abre la vía de la incineración de residuos con esta solicitud de modificación de la Autorización Ambiental Integrada (AAI), por dos vías, puesto que el proyecto recoge el proceso de «transformar residuos cuyo destino final actualmente es la deposición en vertedero, en materiales recuperados con valor económico y combustibles de alto contenido energético«. Es decir, preparar los residuos para quemar en una planta de coincineración (cementeras) o llevarlos a una planta de supuesta biomasa. La planta de mezcolanza la llaman «planta de combustible sólido de sustitución» (CSS). De los 6 vasos de vertido existentes, los 3 de residuos peligrosos ya colmatados, y los 3 de no peligrosos, se unifican dos y se recrecen apoyándose en los de peligrosos, porque la planta de biomasa de 2,5 MW, que quemaría combustible de biomasa, admitiría bajo esa denominación residuos de origen biogénico que no tienen nada que ver con la biomasa. Seguiría el vertido directo a los vasos de aquellos residuos que no pasaran por la combustión o por la estabilización que les permite transmutarse en residuos supuestamente no peligrosos, y se añade una nueva planta de «fabricación de tecnosuelos», de nuevo residuos tratados para ser vertidos como “suelo” artificial.

En definitiva, continuaría la recepción continua de residuos, peligrosos y no peligrosos, que terminarán enterrados o incinerados.

Las modificaciones sustanciales de la AAI que se solicitan para Nerva y Bolaños son un despropósito que la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible tiene que desautorizar con sobradas razones. Hasta que ello no ocurra, Ecologistas en Acción desplegará todas las acciones legales y promoverá todas las manifestaciones de rechazo social que la emergencia sanitaria permita, hasta conseguir la clausura de esos vertederos y el inicio de un genuino programa de Economía Circular y de Producción Limpia en Andalucía.

Sevilla, 16 de abril de 2020

Ecologistas en Acción Andalucía

Contacto:

Daniel López Marijuán, miembro de la comisión técnica del PIRec y representante ecologista en el Consejo Andaluz de Medio Ambiente

672252131.